Los humanos, me dan una re lastima, casi siempre. Incluso yo misma, a mi misma. A veces, me veo en perspectiva, y me doy una re lastima boludo. Las unicas dos personas que nunca me dieron lastima fueron mi abuela Rosita y Andrea Girardi.
Andrea, fue una compañera mia de la primaria, una hija de una dentista que bailaba danzas clasicas y que de repente, de un año al otro, en el colegio, se volvió muy hermosa. La mas hermosa de los 3 cursos, me parece.
Se rumorea en Zarate, o lo lei en algun lado, que Andrea se casò con el principe de Asturias, y que hicieron dos casamientos, uno alla y uno acà, pero que a ambos asistieron las 2 familias y que ahora viven en un castillo, sobre el mar.
Mi abuela Rosita es la otra persona que nunca me dio lastima.
Me dan lastima los humanos, alienados y sus intentos por construir una futuro hibrido descolonizado.
Los humanos leyendo el realismo capitalista sin entenderlo del todo porque entenderlo, de verdad, ya sabemos como termina.
Los humanos y la opresion y explotacion que se esconden detras de la libertad que persiguen, aquellos que sostienen a la razon como una orden patriarcal natural y aquellos que intentan huir de ella como unica fuente de costumbre.
Los humanos y su competencia para ver quien es más cool cuando sabemos que somos todos loosers.
La felicidad humana, incluso, a veces, me da una re lastima.
Los humanos y sus sueños,su sometimiento y sus besos suaves,
sus lamentos, y su miseria y su confusión, en fin, su alienación.
Pero mi abuela Rosita no.
Mi abuela me manda videos de perritos por facebook, creo que sin querer.
Y le saca fotos a sus flores y las sube y las comparte, las auto me gustea porque asi lo siente, se quiere, se gusta.
Y descubrí algo, entre maravilloso y esperanzador,
eso que ella hace, fotografiar, compartir, a veces escribir alguna cosa mientras edita la foto porque la subio sin nada pero asi lo aprendio, y mientras ya tiene un me gusta de la Tia Teresa, bueno, todo eso.. Está sostenido por su orgullo. Su orgullo es su necesidad, es el único motor que hace que ella se adapte, es la tecnificacion de su orgullo y tambien una transduccion. Un orgullo del bueno, de esos que solo entregan fortaleza.
Es su orgullo el que la hace hacer todo sin entender nada y sin esperar nada.
No importa si nadie ve lo que sube, si a nadie le gusta o si nadie comenta porque ella no entiende como funcionan las redes, un me gusta mas un me gusta menos en la vida de mi abuela Rosita no significa nada,por el contrario, mantener las flores vivas en el jardin, sì.
Siento que ella no esta alienada, ni a su manera ni de ninguna manera.
Hace lo que quiere, por ella y para ella y los sentimientos y los pensamientos aun le pertenecen, pasa mucho tiempo en el jardin.
Y es una mujer, a veces, sensible pero tambien, queriendolo o no, se ocupa por mantenerse libre y eso, en estos tiempos, es para mi, el acto mas revolucionario.
En cuanto a la television…por supuesto que los medios manipulan, pero siento que es un tipo distinto de manipulacion, un tipo de manipulacion que afecta algunas areas del cerebro pero aun asi, no deja de ser, un socavamiento mas superficial.
Me gusta creer en esto de que por cuestiones generacionales o por cuestiones de agricultura, pasion, ignorancia, desinteres o confusion, algunas tecnologias aun no han podido plantar del todo bandera en algunas superficies.
Por otro lado, aunque ya lo escribi antes, siento que aun hay un estado humano, el unico, y por suerte gratis, que no permite que el capitalismo hipertecnologico aterrice en nuestra mente que es el de “soñar despierto”.
Ni lo sufiscientemente dormidos como para que nos inyecten la basura que necesiten ni lo sufiscientemente despiertos como para autoinyectarnos inconscientemente la basura al ritmo de la cotidianidad.
Con, eso, no quiero decir que mi abuela sea un zombie.
Ya habia cambiado de tema, y tampoco quiero convencer a nadie, simplemente llevar un registro de las pocas cosas que me generan, a veces, esperanza.
Ya saben amigos, mas sueños despiertos y jardines y menos tiki tiki.